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Se multiplican las pérdidas de agua por rotura
La situación se ha tornado de por demás preocupante y no hay quién le ponga el cascabel al gato. La realidad que se observa en cada vez más calles de Fray Bentos, es algo que comienza a irritar.
Mientras OSE hace campañas promoviendo el uso cuidadoso del agua como recurso finito, sus cañerías revientan y se pinchan por doquier, tanto como el discurso oficial que pide a los compatriotas tomar conciencia sobre la importancia de cuidar un bien público. El agua corre y corre tranquilamente por las calles de la ciudad y lamentablemente hemos incorporado eso a nuestro paisaje com algo natural.
Las cuadrillas no son suficientes porque la demanda supera con creces la capacidad de respuesta y la gente se molesta. Y tiene razón.
Apelando al "Si no se queja, no se queje" el comerciante Carlos Gilardoni, comentó a InfoRÍO que desde hace semanas viene reclamando insistemente por la reparación de la pérdida con resultado infructuoso. Su reclamo es definitiva el de decenas de vecinos que pasan por lo mismo en este preciso instante a lo largo y ancho de la ciudad. Las perdidas se transforman en pozos y los pozos generan accidentes.
Ya es hora de que OSE tome en serio el asunto. Primero, reparando en tiempo razonablemente loq ue se rompió y después anunciando un programa de fondo que permita atender el cambio del sistema de distribución que evidentemente ha colapsado en gran medida por su antiguedad.
