Desde que tenemos uso de razón, hemos asumido qué, la Justicia aunque tarde, siempre llega. Patrañas!! La justicia, según acertadas definiciones, es como la telaraña: atrapa al bicho chico y deja escapar al grande. Al igual que la yarará, pica al pobre de alpargatas pero no al de buenas botas. La SCJ, acaba de dar por tierra con la última esperanza de que se hiciera justicia con Roslik. Es una siniestra burla a los DDHH, lavarse las manos amparados en el pretexto de cosa juzgada, porque en su momento el Tribunal Militar los pusiera en penitencia a Coubarrere y Olivera durante cuatro meses en el Batallón 13 de Blindados en Camino de las Instrucciones, donde disfrutaron de todas las comodidades y visitas placenteras, para continuar luego su carrera como si nada hubiera pasado, culminando con sendos ascensos y retiro honorable, con la consabida jubilación privilegiada que disfrutan los criminales que asolaran nuestro país por casi doce años. Por si alguna duda pueda haber respecto de la actuación de la Justicia, ésta no intervino para nada en el caso Roslik, excepto para dar por válida la actuación del Tribunal Militar. Téngase presente lo expresado por el momento Coronel Néstor Bolentini, Ministro de la Dictadura, quien sostuviera que: " La Justicia Militar, no hace justicia. Sus jueces son asistentes y auxiliares de las Fuerzas Armadas en operaciones. Si algo faltaba para dudar de la Justicia en lo que respecta a juzgar los crímenes de lesa humanidad, la SCJ acaba de poner la frutilla de la torta. Como consuelo, la reafirmación de la condena popular y el repudio a los criminales y a los modernos Pilatos
Eterna paz a la memoria del mártir, Dr Vladimir Roslik, cuyo asesinato permanece impune!!