Con piezas originales y otras que tienen características muy especiales como una pipeta alemana aforada con el águila imperial y la esvástica, quedó inaugurado el laboratorio que fue reconstruido 100% con mano de obra municipal.
George Giebert desarrolló la fórmula de Liebigs en Fray Bentos logrando el extracto de carne, algo que revolucionó el mundo y cambió paradigmas de la alimentación.
Demandó 20 años de investigación y desarrollo llevarlo a escala mundial y todo eso, fue posible en la fábrica de Fray Bentos. En el mundo científico Liebigs tiene la estatura de Newton y en su época polemizaba fuertemente con Pasteur.
Después del extracto, vinieron los cubos oxos que se consumen hasta hoy y hasta se inventó el sistema de carbón para calentar las comidas en las trincheras de los soldados sin que desprendiera humo que fuera advertido por las fuerzas enemigas.
Todos esos avances fueron significativos para el mundo moderno, modificaron los procesos alimenticios dado que se empezó a acceder a carne envasada pronta para consumir.
Para Lucía Lewowicz, investigadora de la Facultad de Ciencias y autora de un libro que INAC, publicó en la web, el Anglo más que una fábrica de alimentos fue empresa de innovación y desarrollo a nivel mundial y Liebigs es considerado el padre de la química orgánica.