Desde mediados de la década del 90, cuando dejamos la actividad sindical para ingresar a la política, en todas las postulaciones que nos tocó vivir el objetico de nuestro trabajo siempre fue el ciudadano, la gente, el pueblo. Por convicción sostenemos que la actividad sindical (que es política también), no debe coexistir con la política partidaria. Eso sí, el objetivo siempre es el mismo, el colectivo gremial, las personas individuales y las que definimos antes cuando hablamos de nuestra actividad política partidaria.

El 15 de febrero de 2015 asumimos la banca en la Cámara de Diputados con el propósito constitucional de representar a todos los habitantes del departamento. Las promesas de campaña en cuanto al ejercicio de una posible diputación son ni más ni menos que lo que marca la Constitución de la República, ustedes dirán, como debe ser, si lo venimos logrando o no. En función de ello hemos desarrollado una diputación en todo el departamento, con dos oficinas de atención permanente en Young y en Fray Bentos, con una logística y planificación de trabajo con referentes y visitas en el resto de las localidades. Nunca preguntamos a quienes acuden a nosotros de qué partido son o a quién piensan votar. Y cada uno de los muchísimos que atendimos en estos más de cuatro años son testigos de esta forma de acción. Más allá de nuestras concepciones y de la referencia a la Constitución, tratamos de hacer una representación a hechura de lo que nos pidió siempre la gente.

El 2019 es un año electoral, con total frontalidad y transparencia hace un año definimos hacer una especie de validación, de plebiscito sobre nuestra gestión, no sólo la del diputado, también de quienes ejercieron esta diputación y de las compañeras y compañeros responsables en el rol del equipo, las que atienden gente, las que se ocupan de sus problemas, las que sostienen el vínculo entre nosotros y el pueblo. Por eso mantenemos sostenidamente con más esfuerzo que nunca nuestra tarea parlamentaria a la que se le suma el sinnúmero de planteos y demandas que provienen de los vecinos. Se consiguen resultados positivos o no, pero el esfuerzo no cesa más bien se incrementa.

El 15 de setiembre comienza el receso parlamentario y el 27 de octubre se celebran las elecciones nacionales. Esa ventana de tiempo nos permitirá, ahora sí, trabajar en la campaña para renovar la banca sin dejar nuestra responsabilidad en el mandato ciudadano que finaliza el 14 de febrero de 2020. Acá viene la dificultad, para que nos comprendan, porque como hay elecciones internas de las cuales participaremos sólo testimonialmente muchos no entienden que tenemos una representación vigente, que es nuestra prioridad pero que además de todo, es lo que corresponde. No estamos en campaña, y no lo estaremos en este ciclo que se cierra el 30 de Junio.

En octubre concurriremos a las urnas en una lista que será encabezada por uno de los cuatro compañeros, Andrade, Bergara, Cosse o Martínez, con el senado del FLS y con nuestro nombre encabezando la lista a la Cámara de Diputados. Por tanto y sin profundizar en los vaivenes del internismo, porque no nos parece conveniente, pero fundamentalmente porque si de algo nos sentimos satisfechos es de haber honrado y honrar hasta el último día el mandato recibido.

-Tany Mendiondo-